TEMPORADA 1
Como veis aun le queda camino, pero Ciganita va aprendiendo. Camino lento, pero seguro.
¿Dije seguro? Bueno, a veces no tanto y es que esto de ser autodidacta es lo que tiene, ensayo y error. Cigana improvisa, mezcla y al parecer en esta ocasión, la mezcla no fue muy buena que dijéramos.
Cayo al suelo, Âżel vapor q inhalo? Âżuna explosiĂłn? No recuerda que paso, pero estaba tumbada en el suelo, apenas podĂa levantarse.
Y de reojo miro al espejo... ÂżComoooooo? Nooo!! Soy verde??? Pero que ha pasadoooo???
Algo habĂa salido tremendamente mal mientras preparaba aquella pociĂłn. Estaba totalmente hundida. Hundida y verde, no podrĂa volver a salir jamĂĄs en su vida, aquello era horrible...
IntentarĂa ver en que habĂa fallado, Âżpor que en el libro no ponĂa nada? Espera, que si ponĂa algo, abajo en letra diminuta, ADVERTENCIA: MAL ELABORADA, PROVOCA REPULSION MAGICA!! ÂżEn serio?ÂżAhora? ÂżPor que esa manĂa de poner las cosas importantes en letra pequeña? Pero ey! Sus manos ya no eran verdes, uff! Respiro aliviada! todo habĂa pasado.
Mientras Cigana luchaba con sus cambios de piel, Django estaba entretenido, con su muebles de madera, sin querer le estaba cogiendo el regustillo a eso de la sierra y el martillo. A Samaray le pasaba exactamente lo mismo con el punto! Ya estaba en el nivel 3 de la habilidad, aunque un bug en la red de Plopsy hacia que no estuvieran vendiendo nada de nada.
Y bueno, a Django le apeteciĂł tocar un poco su vieja guitarra, desde que Madalena habĂa desaparecido, apenas habĂa tenido tiempo para tocar.
Django: mira nena, esta te la dedico.
Y claro asĂ, Sama no podĂa sentirse mas especial y profundamente enamorada, y es que Django era tan guapo, majo, cariñoso y loco, muy loco, eso si.
Al escuchar la mĂșsica Cigana se acerco.
Cigana: jo! como echaba de menos que tocaras
(Y mirad Salem, es un gatito bueno que ya creciĂł)
Pero Samaray saliĂł corriendo como alma que echa el diablo!! No podĂa aguantar, y vomito lo mas grande!! Ay ay ay!! Que me da que tanta fiesta con Django, ha dejado premio.
Y nada mejor para salir de dudas que hacerse la prueba.
Sama: Ay! no puedo mirar, no puedo.
Django: A ver, trae aquĂ.
Sama: Ay! ¿Qué pone? no te cayes Django, ¿Qué pone!?
Django: Es positivo nena -Y la abrazo.
Sama: joder! la Ama me va a matar!
Si, si ahora poner cara de sorprendidos, la Ășnica con derecho a poner esa cara, es Cigana.
Cigana: ostras chicos! ¿En serio? ¿Pero como no habéis tenido mas cuidado? Con todo lo que tenemos encima ¿de verdad??
Django: ya! pero Cigana, piĂ©nsalo, vas a ser tĂa. Un Django en miniatura.
Samaray se puso feliz al ver a Django ilusionado.
Sama: Âżen serio Django te alegras? No sabes lo feliz que soy.
Los chicos se llenaron de felicidad de un momento a otro.
Cigana: Pues chicos si vosotros estĂĄis contentos, yo tambiĂ©n!! Voy a ser tĂa!!
DespuĂ©s del susto inicial que les habĂa dejado un poco en sock, al parecer todos se habĂan emocionado imaginĂĄndose un pequeñĂn revoloteando por la casa.
Django: wow!! nena no me lo puedo creer, un mini yo, o una mini tu!! ¿Te imaginas una bebita tan hermosa como la mama?. Cigana apunta en la lista una escopeta!! Nadie se acercara a mi niña jajaj!!
Sama: venga Django jajajaj.
Realmente estaban muy contentos.
Y Cigana y Samaray felices, pero sobre todo sorprendidas, cuando Django se arrodillo y saco un anillo del pantalĂłn.
Django: A ver se que es algo repentino, y se que te mereces mucho mas de lo que puedo darte ahora, pero ÂżQuieres casarte conmigo?
Samaray estaba aun mas en sock, demasiadas emociones juntas. Django empezaba aponerse nervioso.
Samaray: Pues claro que si tonto! Como no voy a querer. Pero Âżesto lo tenias preparado? ÂżCĂłmo es que...? Es perfecto!!
Django: es el anillo de nuestra abuela, mama me lo dio hacia tiempo y nadie mejor que tu para llevarlo.
Sama: Ay cuanto te quiero Django!! Ahhh!! que nos casamooos! Y vamos a tener un bebe!!No puedo ser mas feliz.
Cigana estaba super emocionada.
Cigana: jo! chicos me vais a hacer llorar. Deseo que seĂĄis felices siempre.. Jo! os quiero tanto.
Y les dio un abrazo de oso gigante. El ultimo a su hermano.
Cigana: Django no puedo creerlo todavĂa.
Django: Âżverdad hermanita? Ahora solo falta mama y todo serĂĄ perfecto.
Cigana necesitaba gritarlo a los cuatro vientos, y como no, mas oportuno que nunca, apareciĂł Guidry
Guidry: Bueno niñita! Te veo muy feliz hoy!!
Cigana: Y asĂ es, voy a ser tĂa!!
Guidry: ÂżtĂa??
Cigana: siiii!!! Mi hermano!! Va a ser papa. ( y ella pensaba y tu medio abuelo Âżno?)
Gidry: oh q bien (muchacho loco e irresponsable) - dijo refunfuñando
Cigana: ¿Qué dijiste?
Guidry: no nada. Que que alegrĂa, me vuelvo loco, que va a se padre.
ÂżAquel mocoso papa? En fin, un tirĂłn de orejas le hubiera dado, sin embargo le dio un viejo abrigo a Cigana para que se lo diera Django.
DespuĂ©s de darle aquello se habĂa marchado refunfuñando, ÂżQuĂ© le pasaba?? Bueno bonito detalle por su parte.
Pero rĂĄpido aquello dejo de importar.. ÂżVerde otra vez??? Noooo!! Si las pociones no funcionaban, Âżtal vez el espiritismo?
Nooo!! No funciono! La sesiĂłn habĂa salido mal, todo salĂa mal, era aquella maldiciĂłn. Otra vez era verde, y nada de lo que hacia estando asĂ, salĂa bien. Necesitaba ayuda! Tal vez Madame Marie sabia que hacer! IrĂa a su casa, pero debĂa de taparse bien! Nadie debĂa verla asĂ..
Cigana: Madame Marie, no se que hacer. Marie: Ay! deja de lloriquear mujer. Y cuĂ©ntame q pasa! Pero quĂtate eso de la cara.
Cigana: de eso se trata soy verde.
Marie: soy verde, soy verde. SĂgueme.
Al instante estaban en el Reino mĂĄgico. Ella apareciĂł montada en escoba, la pillo tan por sorpresa que apenas tuvo tiempo de agarrarse y cayo contra el suelo
Cigana: au!!!
Marie: deja de quejarte! Ya estas normal, la maldición es intermitente, eres una descuidada, después pasa por el callejón y cómprate un libro de purga de maldiciones, pero ahora a trabajar.
Mari la habĂa llevado a una zona donde al parecer las brujas y magos se entrenaban, y hacĂan duelos.
Cigana: Wow esto es... Es precioso!
Marie: concéntrate, llama a tu familiar y en guardia.
Casi sin darse cuenta una rĂĄfaga se abalanzaba sobre ella.
Cigana: REMUUS!!
Apenas le dio tiempo pero alcanzo a esquivar el lanzamiento de Marie y no sabia como, pero incluso fue capaz de devolverle el hechizo.
Cigana: siii! Yas!! ÂżLo hice bien?
Marie: cĂĄllate muchachaaa!!!
Esta bien- pensĂł y trato de concentrase.. - soy una gran bruja, puedo concĂ©ntrame- se repetĂa.
Pero un hechizo que lanzo Marie la dio de lleno.
La habĂa lanzado contra el suelo y todo dolĂa. Tras varios duelos perdidos. (quedaba tanto por aprender) terminaron.
Marie: esta bien por hoy.!
Se sentia algo mareada. Hacia tanto tiempo que no hacia ningĂșn duelo que su fuerza mĂĄgica se habĂa esfumado en un santiamĂ©n . Cigana estaba tan contenta con la sesiĂłn. que la dio un abrazo sin pensar.
Cigana: gracias ab.. Madame Marie
Marie:eh!Bien,bien venga.
Estaba feliz con el entrenamiento, se sentĂa mas fuerte, mas ..bruja. Ahora irĂa al callejĂłn a comprar el libro del que le habĂa hablado Marie sobre la purga de las maldiciones, que ya iban dos. Sin saberlo al perder varios duelos, otra maldiciĂłn le habĂa alcanzado "abrazos molesto"
Cigana respiro tranquila al averiguar que aun les quedaban dos! Fiu!! Menos mal. Uno, serĂa para ella. DebĂa ponerse ya a leer, la fiesta era esta noche y no podĂa ir verde!
(¿Os imaginåis a Omar recogiéndola tal cual bruja del este? No, no, no.
"Venga Cigana que tu puedes" se decĂa, "tiene que estar por aquĂ, solo has de seguir buscando!!"
Hasta verde estĂĄ bonita đ